Agentes de la benemerita denuncian que están sufriendo desabastecimiento de ropa interior corporativa por el robo perpetrado por desalmados en los tendederos de los cuartelillos.
La situación, que no tiene precedentes, está provocando que los agentes hayan de portar la misma ropa interior más de una semana seguida produciéndoles escozor y generando situaciones desagradables en los coches patrulla donde las distancias cortas hacen que los efluvios íntimos sean más difíciles de disimular.
«Estamos hasta los cojones» ha manifestado un cabo segundo que aseguraba llevar la ropa interior de sus señora ante la falta de calzoncillos corporativos.
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